
El parque durante este mes presenta un aspecto muy peculiar que llama la atención y es su camino de lapachos formando una senda peatonal de lo más colorida que permite recorrerlo en toda su extensión. Estamos hablando de un espectáculo de colores únicos que se limita a esta época del año solamente.
Pero el Parque Sunchales no es solo eso, se esconden diferentes verdes, se aprecian otras flores, se contrasta lo urbano con lo natural y en su barranca alberga a familias de pescadores que muchas veces no los vemos, ya que se encuentran invisibles al paisaje cotidiano.
En lo específicamente fotográfico, sobreabunda la luminosidad ya que el horario elegido para tomar las fotos fue el mediodía, un horario díficil (pero el único que tenía disponible), por lo que se encuentra un contraste muy duro entre sombras y luces, pero a la vez nos permite captar los colores en todo su esplendor.